David Milz, de 49 años, se coronó como el mayor mentiroso del año. Su frase imbatible fue: "casi tuve una novia psíquica pero ella me dejó antes de conocernos". El hombre explicó que la idea se le ocurrió hablando con unos amigos y que pensó que podría ser lo suficientemente buena como para ganar el premio del Burlington Liars Club. Y así fue.
El club de mentirosos fue fundado en 1929 en honor a la creatividad y buen humor inherente a toda exageración. La membrecía cuesta 1 dólar y dura toda la vida. Este año recibieron más de 500 mentiras para ganar el codiciado galardón.
Entre las finalistas de este año estaba también: "Mi vecino compró un espantapájaros tan bueno que los cuervos devolvieron el maíz que robaron el año pasado". Y entre los ganadores de años anteriores se destacan: "Mi abuelo cortaba las tostadas tan finitas que sólo tenían un lado". "Los minerales del suelo de Montaña de Hierro, Michigan, son tan buenos que a mi oveja le empezó a crecer virulana". "Mi nieto es tan buen mentiroso que convencía a su mamá de que los pañales los había ensuciado otro". |