Dominic Deville se inspiró en algunos payasos horrorosos como el célebre Pennywise para crear su personaje. Lo ofrece para animar fiestas en Lucerna y según dice, su éxito es tal, que se ríe todo el camino hasta el banco.
Su trabajo, sin embargo, no empieza el día del cumpleaños. Él se toma el trabajo de mandarle mensajes de texto amenazantes al homenajeado desde una semana antes. Los llama por teléfono y les manda cartas horrendas. Les advierte que el día de su cumpleaños algo terrible les ocurrirá.
El Payaso Maligno luego se presenta en la fiesta y espanta a los niños. Contratado por los propios padres de la víctima y el show termina cuando Dominic le arroja la torta en la cara. Si los progenitores del cumpleañero observan que su hijo está al borde del colapso coronario o que va a necesitar una costosa terapia psicológica pueden interrumpir el juego. "Pero la mayoría de los niños adoran que los asusten hasta los huesos", explica. |